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29/9/13

El sentido de la vida

EL SENTIDO DE LA VIDA


Dios te colme de bendiciones!! 


El sentido de la vida, es un aspecto que de una u otra forma está presente en nuestras mentes, formular esta pregunta siempre es útil, cuando encontramos la respuesta nuestras vidas cambian en un antes y un después.



Acompáñame en esta reflexión!


Decimos que venimos a esta tierra para vivir y dejar huella de que estuvimos aquí, pero una pregunta nos hacemos por lo menos una vez en la vida: qué es lo que le da sentido a mi vida? Para qué vivo? Cuál es mi propósito?


Verdaderamente estas son interrogantes que no son fáciles de responder, y que nadie más puede “entrar en nosotros” para encontrar la respuesta.

Desde que somos niños, el sentido que aprendemos de la vida es el que  nuestros padres nos enseñan: ser buen hijo, estudiar, trabajar, formar familia, etc. En el transcurso de este camino vamos realizando todos o algunos de los principios que hemos aprendido, cursamos la profesión que nuestros padres soñaron para nosotros (en muchos casos), pero llega un momento en el que nos preguntamos: me gusta el trabajo que tengo? Me siento bien haciendo esto o cual cosa?


El sentido de la vida se convierte en ser buenos profesionales, ser competitivas, imponentes, otras veces, el sentido de la vida es ser esposa, una buena esposa y buena madre, también puede ser en convertirnos el mejor artista en la rama que queremos.


Después de todo el sentido de la vida es el que nosotros le queremos dar. Todo aquello que nos hace feliz le da sentido a la vida.

Hay momentos en el que sentimos que estamos perdidos, y buscamos ayuda: de un terapeuta, psicólogo, orientador, guía espiritual, como quieras llamarle, buscando un diagnostico para nuestra situación, sentir que llegamos a un lugar seguro y estable, en donde el factor incertidumbre salga del escenario.

Otros prefieren buscarle un sentido a su vida en la espiritualidad, realizando meditaciones, uniéndose a grupos que tengan su mismo interés, uniéndose a entidades religiosas, también buscando de Dios como entienden que deben hacerlo. Y muchos dicen que tienen contacto con su ser interior y con esa fuerza superior que rige el universo.

Otros necesitan un encuentro en sus vidas consigo mismos que los impacte, que les haga tocar fondo, aquí entra la palabra Dios a nuestras vidas. Decimos Dios me oye, me da todo lo que le pido, no se  enoja porque yo haga tal o cual cosa, etc.

Para los que se unen a una “denominación religiosa” como se llama hoy día, porque han reconocido la necesidad de “algo más allá” o “algo superior”, Dios se convierte en el sentido de su vida.

Nosotros nos acercamos a Dios mayormente por una necesidad, Dios nos llama con amor o con dolor, su hijo Jesús es la vida, es la luz de los hombres. Para los que creemos que es así, nos da sentido de la vida. Dice en la Escritura Santa, qué es el hombre para que en el pienses? Exclama el salmista.

Citamos un ejemplo de lo que es tener sentido de la vida: El Apóstol Pablo dice: “Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia”. (Libro de Filipenses 1:21).  El sentido de la vida de este hombre era Cristo, a tal punto que morir, morir (ninguno queremos morir) era una ganancia, que vehemencia tan fuerte, para El es como un gozo.

Servir a Cristo, se convierte en el sentido de la vida de toda persona, que una vez llegó a los pies del Señor, cumplir la palabra, demostrar con hechos o acciones que es otra persona desde que encontró el punto que marca la diferencia en antes y después.

El sentido de la vida es un viaje, llegamos y una vez estamos firmes seguimos desarrollando lo que hemos encontrado.

Tengamos animo en buscar y encontrar el sentido de nuestras vidas, examinemos nuestro interior, busquemos indicios en todo lo que nos ayude, siempre se puede. Recuerda que el sentido de tu vida es el que tú quieras darle, en el camino se añaden los complementos a tu significado, siempre hay “algo” o “alguien” superior a nosotros, muchos le llaman “fuerza del universo”, “creador del infinito”, “tu yo interior”, yo prefiero llamarle “Dios”, no cualquier Dios, aquel que en el principio el verbo era con EL y el verbo era El. Aquel que dice que es el inicio y el fin.  


Finalmente, perseveremos en descubrir el sentido de nuestras vidas, es mejor tarde, que nunca haberlo encontrado!!


Paz y Gracia


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